Dienstag, 5. September 2017

CÓMO MOVER OBJETOS PESADOS CON MÚSICA


¿Con música? ¿Es posible? Sí, es posible. Veamos: monjes 
tibetanos moviendo grandes peñascos montaña arriba, 
haciendo sonar trompas alargadas. Y...

La Biblia cuenta que los muros de Jericó fueron volteados por 
los israelitas haciendo sonar sus cuernos. 

El clarividente y médico Edgar Cayce refiere que los antiguos 
atlantes construyeron la pirámide valiéndose de sonido y 
vibraciones. ¿Cómo? Pues haciendo flotar piezas de granito de
10.000 toneladas sobre ondas vibracionales. Así construyeron 
la monumental gran pirámide de Cheops.

Monjes tibetanos levitan piedras con sólo tambores y rocas 
pesadas con sólo sonidos. Así, un campo sónico concentrado y
en vibración puede anular la fuerza de la gravitación.

El secreto reside en la ubicación geométrica de los 
instrumentos musicales con respecto a las piedras y en la 
entonación armónica de tambores y trompetas. 

El canto de los monjes en determinado tono y ritmo hace el 
resto.

Antiguas crónicas hablan de máquinas voladoras surcando el 
aire con un sonido melodioso. ¿Acaso estas máquinas 
voladoras estaban sintonizadas a la ecuación de las ondas 
armónicas unificadas? ¡Vaya a saber! 

Lo cierto es que los monjes tibetanos nos ayudan a construir 
una máquina voladora antigravitacional con propulsión sónica. 
Para eso, sólo necesitamos el círculo de generadores sónicos 
trazado por los tambores, trompetas, etc. Así, tendremos un 
disco que crea una fuerza ascensional antigravitatoria en el 
centro.

Los monjes sitúan los tambores y trompetas en un tercio de 
círculo, con los sacerdotes detrás de los tambores formando 
una espiral. Esto responde al concepto de la formación de 
materia en el espacio por movimientos ondulatorios helicoidales
en forma de espiral. Movimientos ondulatorios similares habrían
ocurrido para manipular la materia.

La ciencia ha avanzado mucho en este campo. Muchos 
vehículos experimentales fueron construidos a tal fin. 
Conclusión: con este tipo de investigación, los días del avión 
convencional están contados.

Keine Kommentare:

Kommentar veröffentlichen